El ICOMME reitera su preocupación por los casos de rabia tras conocer el informe de los veterinarios de la Ciudad Autónoma
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Este documento subraya que la consejera les habría manifestado “su animalismo por encima de todo, situándolo al mismo nivel de la Salud Pública y, a veces, por encima”
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En las últimas semanas se han detectado 7 perros con rabia y ya hay 5 víctimas por mordeduras
El Ilustre Colegio Oficial de Médicos de Melilla, una vez más, quiere mostrar públicamente su preocupación tras conocer el informe de los veterinarios de la Ciudad Autónoma. Según recogen hoy los medios de comunicación locales, la consejera de Salud Pública, Francisca García Maeso, les habría manifestado “su animalismo por encima de todo, situándolo al mismo nivel de la Salud Pública y, a veces, por encima”.
Desde esta institución ya avisamos a mediados de diciembre pasado, hace tres meses, del peligro en el que se encontraba Melilla al haber entrado en nivel de alerta 1 por rabia. Y ahora, gracias a este informe de los veterinarios municipales, se conoce que en octubre de 2021 ya alertaron a la Administración local de la urgencia que existía y pedían recoger de la calle a “la gran población de perros asilvestrados y sin vacunar”, porque “de entrar algún pequeño carnívoro contagiado de rabia desde Marruecos, el virus, con toda probabilidad, iba a circular entre ellos”. La prensa también señala que dicho documento, fechado el pasado 21 de enero, recoge que en noviembre se cumplieron sus pronósticos al alcanzar el citado nivel 1 de alerta.
Desde el Colegio ya alertamos de la alta virulencia de esta enfermedad, con alta letalidad si no se interviene a tiempo. Por ello, reclamábamos una intervención rápida y decidida por parte de las autoridades competentes. Actuación que, según el informe de los veterinarios y los datos de incidencia, no se ha llevado a cabo. Nuestra preocupación es máxima porque son ya 7 los perros contagiados y 5 las víctimas de sus mordeduras.
Los veterinarios acusan a la consejera de “malentendido y exacerbado animalismo”, y apostillan que el Servicio de Recogida de Animales carece de recursos humanos y materiales para llevar a cabo su desempeño. Esta cuestión acrecienta aún más la preocupación del Colegio, hasta el punto de considerar temerario el hecho de no actuar y tomar medidas drásticas para detectar estos casos de rabia y evitar males mayores.
La Consejería de Salud Pública debe hacer honor a su nombre y defender el bienestar de la ciudadanía, procurando por encima de todo que se garantice la salud de los melillenses. Y en este caso, si no actúa con celeridad, no lo estará haciendo.